¡Hola amigas! Hoy quiero hablarles de un tema que ha estado en el aire últimamente: la kombucha y si es segura durante el embarazo. Para muchos, esta bebida efervescente y llena de probióticos es un placer diario, ya sea por su burbujeante sabor o por los supuestos beneficios para la salud, como mejorar la digestión o regular el azúcar en sangre. Sin embargo, he recibido varias preguntas sobre su consumo durante el embarazo, así que aquí les traigo la información más relevante.
¿Qué es exactamente la kombucha?
Es un té, ya sea verde o negro, que se endulza y fermenta con una combinación de bacterias y levaduras, conocido como SCOBY. Este proceso crea una bebida ácida y ligeramente alcohólica. Y aquí viene la primera preocupación: el contenido de alcohol. Aunque la kombucha normalmente tiene menos del 0,5% de alcohol, hay casos en que el contenido puede ser más alto, especialmente en las versiones caseras. Por eso, muchas organizaciones de salud recomiendan evitarla completamente durante el embarazo. Si te interesa conocer más sobre las experiencias de otras mujeres, puedes leer sobre el tema en uno de nuestros otros blogs aquí.
Contaminación bacteriana
Otra preocupación es la posible contaminación bacteriana. Aunque se pueden usar técnicas estériles, la mejor forma de asegurarse es optar por kombucha pasteurizada. Esto es especialmente importante porque durante el embarazo, quiero evitar cualquier bacteria que podría causar complicaciones, como la listeria. Así que, si decides tomar kombucha, asegúrate de que sea comprada en la tienda y esté pasteurizada. La kombucha casera es un no-no.
La cafeína en la kombucha
Además, no olvidemos la cafeína. La kombucha puede contener entre 15 y 130 mg de cafeína, dependiendo del té que se utilice. Si ya estás tomando café o té, es importante que lleves la cuenta total para no exceder la cantidad recomendada de 200 mg al día. Si quieres saber más sobre este tema, te recomiendo este recurso sobre el proceso de IVF que ofrece información útil para quien está buscando quedar embarazada.
Conclusión
En resumen, es mejor dejar de lado la kombucha durante el embarazo por razones de alcohol, posible contaminación bacteriana y cafeína. Si buscas alternativas, el agua simple o las aguas saborizadas pueden ser buenas opciones para mantenerte hidratada y satisfecha.